29 abr 2007
Chantal Maillard


Algún día, cuando el aire pese como tierra
sedienta sobre los cuerpos desnudos,
tal vez alcance a ser la voz de aquel peregrino
que enmudeció o el agua que,
gota a gota, resbala por su pecho.

Él nunca estuvo en la otra orilla, pues sabe
que allí los dioses duermen en el polvo.
Y sabe que cuando un hombre por azar
se duerme en la otra orilla,
-ese lugar que siempre ocupó la mirada-
ellos se despiertan y se contemplan en él.

Si ese hombre, entonces, se despierta,
se convierte en espejo y estalla con el sol...


 
posted by Sirena at 1:41 p. m. |


2 Comments:


At 29.4.07, Anonymous Anónimo

26 febrero, 2007

Se um homem desperta...
_E será que ele está mesmo dormindo? Ou estará na espera, qual predador esperando a presa.
Fica bem.
Felicidades.
Manuel

 

At 30.4.07, Blogger Antona

Te deseo, el mayor de los exitos ,en esta nueva aventura
bss